QUINTO:
Con la respuesta del Fiscal Vladimir Núñez Herrera, la cual fue un insulto a
nuestra familia, al buen juicio, a la razón, a la lógica, a la política, a las
leyes cubanas, a sus compañeros fiscales, a la Fiscalía, y a nuestro abogado
Antonio Gainza en particular, de acuerdo a la página 2 de mi queja.
SEXTO:
Con una denuncia formal de intereses inescrupulosos que evaden rectificar
errores, a expensas de un grave perjuicio económico, síquico y moral para una familia
entera, y más grave aún, a expensas de la denigración del sistema judicial pues
todo el pueblo de Abreus conoce, que en diciembre de 1996 se vendió camarones
de forma liberada en este poblado, y que
las 4 libras que me fueron ocupadas, en violación flagrante de la
inviolabilidad de mi domicilio, estaban destinadas al consumo familiar, según
se relata en la propia página 9 y la
17.
SÉPTIMO:
Con la denuncia de que el Coronel Felipe Alemán Cruz, Vice fiscal General, Jefe
de la Fiscalía Militar, infringió flagrantemente lo preceptuado en el Artículo
450 de la Ley Procesal Penal Militar, omitiendo informarme las
razones que tuvo para no darle curso a mi solicitud de Inspección Judicial,
violando, adicionalmente, el Artículo 66 de nuestra Constitución, denunciado
en la última página del referido escrito.
OCTAVO:
Y con la denuncia de Tener pruebas irrefutables que es inmoral lo que se ha
hecho a mi familia, y la forma en que se ha pretendido evadir su rectificación,
como se cita en la página 17 de mi
queja.