Mi deseo fue siempre cumplir el deber hasta el último aliento (¿No constituye esto una declaración, aunque eufemística, que
su deseo fue siempre prolongar su dictadura hasta que no pudiera más?).
Es lo que puedo ofrecer (¿Reconoce que nada imperecedero
ha podido ofrecer al pueblo?).
A mis
entrañables compatriotas, que me hicieron el inmenso honor de elegirme en días
recientes como miembro del Parlamento (¿No demuestra el
Parlamento con su elección la falta de democracia, la apatía y el desinterés
por mejorar la situación del país, si Fidel no ha logrado avanzar con salud en
47 años no me imagino que pinta en esa Asamblea ocupando el puesto de alguien
con capacidad, méritos y salud?), en cuyo seno se deben adoptar acuerdos
importantes para el destino de nuestra Revolución (¿Qué
le ha importado el destino de la nación durante su dictadura?), les
comunico que no aspiraré ni aceptaré- repito- no aspiraré ni aceptaré, el cargo
de Presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe (¿Acaso alguien lo dudo?).
Continúa...