Criticado debió ser Raúl Castro a puerta cerrada, cuando se comprometió en su discurso de
clausura a trabajar para responder a la presión Internacional, y esforzarse por
combatir las injusticias, las exclusiones sociales, y eliminar la
discriminación de conciencia, las desigualdades sociales, la marginación, las
violaciones de los derechos humanos y el quebrantamiento de la constitución y
las leyes en Cuba. Párrafo 8 de su Discurso: "Expresamos también nuestra
firme disposición de trabajar para enfrentar los desafíos del escenario
internacional y realizar esfuerzos para impulsar la equidad e inclusión
social, erradicar la
discriminación, las desigualdades, la marginación, las violaciones de los
derechos humanos y las transgresiones al Estado de Derecho."