El 6 de febrero de 2002, Ernesto
Roque/Grupo Decoro publicó en www.cubanet.org: "El disidente Oswaldo Payá
Sardiñas aseguró en La Habana que el Proyecto Varela recogió ya las 10 mil
firmas que exige la Constitución cubana para presentar o modificar leyes. El
disidente dio a conocer que "el gobierno ha detenido, amenazado,
encarcelado y secuestrado a más de 300 gestores del Proyecto con el objetivo de
que estas firmas no sean entregadas a la Asamblea Nacional "...Osvaldo
Alfonso Valdés, presidente del Partido Liberal Democrático de Cuba, expresó:
"El Proyecto Varela da muestra que la oposición cubana tiene fuerza moral
y que se considera beligerante, ya que con todas las limitaciones que se
tienen, desde la represión hasta no contar con espacios en la prensa, es un logro dentro del miedo alcanzar esta
cifra"." Sin embargo, podemos añadir, que fue entonces cuando el Comité de la
Constitución y Asuntos Legales de la Asamblea
Nacional del Poder Popular de Cuba, bajo instrucciones de todos sabemos quién, respondió
a la iniciativa del Proyecto Varela con la idea más absurda y anti democrática
jamás concebida; proponiendo que la constitución cubana fuera enmendada para
hacer permanente el carácter socialista del estado
cubano. Y se concibió el artículo
137, que lo veo como una grosera broma, un error político garrafal de los
Castros, que no soportará el primer análisis futuro que se haga a nuestra Carta
Magna. Y todos sabemos también cómo se manipuló la aprobación casi unánimemente
de semejante disparate. Precisamente, la actual Petición que estamos lanzando a
las Cortes Europea e Interamericana de Derechos Humanos constituirá una
continuidad de la lucha de Oswaldo Payá y el Proyecto Varela; y espero que así
lo entiendan, porque así se concibió y esa es su intención. Por ello insistimos
en la necesidad de lograr que este se convierta en un Proyecto de todos los cubanos,
y que en correspondencia lo respaldemos con el mayor número de firmas posibles,
si es que verdaderamente soñamos con un levantamiento popular nacional, o un
movimiento armado futuro que pudiera contar con la solidaridad y apoyo de otras
naciones.