Mi siguiente abogado, de la Habana, el experimentado
Dr. Iván Celestrín, luego de estudiar minuciosamente el expediente que yo había
conformado al efecto, concluyó que lo mejor que yo debía hacer era enviar un
escrito de disculpa a todos y cada uno de los funcionarios que yo había
insultado en mis denuncias, pues peligraba no solo mi libertad, y mi seguridad
personal, sino también la estabilidad económica y psíquica de mi familia
entera. Yo no podía confiar en la justicia cubana ante esta denuncia por
Desacato. Me explicó: "Mira, te han violado el domicilio y te han
practicado un Registro Ilegal, que constituyen dos graves delitos en cualquier
país democrático del mundo, con el único fin de hostigar a tu familia por
ejercer un trabajo legal por cuenta propia, y no has logrado justicia".
"Además, te han impuesto 5000 pesos de multa, te han decomisado el
refrigerador doméstico y te han cerrado tu negocio de manera totalmente ilegal;
primero, porque las 4 libras de camarones que te ocuparon eran de procedencia
lícita; segundo, porque la tenencia de camarones no está contemplada como
infracción alguna en el Decreto Ley de la Pesca aplicado en tu caso; tercero, porque
los inspectores de la Pesca que te impusieron la multa actuaron fuera del marco
de su competencia legal, que son las embarcaciones y lugares donde se lleve a
cabo la pesca o actividades conexas con ésta; y finalmente, porque hay una
Sentencia firme de Registro Ilegal, perpetrado por dos de los actuantes en
dicho operativo, para llegar a la supuesta infracción relacionada con las
ridículas 4 libras de camarones ocupados, lo cual anula automáticamente las
actuaciones de los agentes, a la luz de las propias leyes cubanas, con la
inmediata devolución de la multa, el refrigerador decomisado, el permiso para
tu negocio, y hasta una posible indemnización por daños y perjuicios; y no has
encontrado justicia en 6 años de litigio, a pesar de haberte defendido
correctamente, y haber contado con la asistencia de 3 abogados diferentes contratados."
Continuará...